KÁŤA KABANOVÁ (KATIA KABANOVÁ) JW I/8

Ópera en tres actos

Libreto de Leoš Janáček, según el drama "La tempestad" de A. N. Ostrovski (traducción: Vincenc Červinka)

1920-21, rev. 1927

Estreno: Brno, 23-11-1921 

Primera edición: Universal Edition, Viena, 1922 (partitura y reducción para piano); 1992, 1993 (partitura y reducción para piano, ed. Charles Mackerras, versión de 1927)


  • La temática rusa apareció varias veces en la obra de Janáček. El drama trágico de la Rusia zarista de la segunda mitad del siglo XIX trata de la mujer joven que es conducida al suicidio a causa de la moral hipócrita de la sociedad. En Katia Kabanová creó Janáček una de sus obras más líricas.

Cuando a inicios del año 1919 Janáček empezó a pensar en el drama La tempestad de Ostrovski como argumento para una nueva ópera, se avecinaba su sexagésimo quinto cumpleaños. Durante los últimos tres años mucho cambió en su vida; el año 1916 logró por fin llevar a cabo Jenůfa en el Teatro Nacional de Praga y, dos años después, sonó la ópera en Viena, lo que supuso un paso decisivo en la imposición de la obra del compositor en el extranjero. En verano del año 1917, conoció en Luhačovice a Kamila Stösslová, quien se convirtió en una preciada amiga e inspiración de su obra tardía. Justamente estos acontecimientos, que a Janáček le devolvieron la alegría y la confianza en sí mismo, condujeron hacia una actividad creativa insólida del compositor. El libreto para la nueva ópera se lo creó Janáček mismo mediante el uso de una traducción checa de La tempestad, pero el problema estaba en el título de la ópera. En una carta al traductor Vincenc Červinka de marzo de 1921, Janáček escribe: «"Tempestades" existen ya varias en obras musicales y operísticas. No se recomienda por tanto este nombre. Tampoco es una muestra natural del principal centro de gravedad de la trama... Psicológicamente, el interesante transcurso lo lleva Katěrina.  El director Schmoranz me recordó que el título Katěrina podría traducirse a Kateřina II. Propuso Katia. Así le llaman Boris y Tichon. Me inclinaría por tanto por esa denominación. ¿Qué opináis?...». Červinka consintió, pero recomendó añadir el apellido para que fuese evidente que se trata del tema de Ostrovski. Así surgió el título definitivo de la ópera Katia Kabanová. El estreno mundial del 23 de noviembre de 1921 en el Teatro Nacional de Brno, preparado musicalmente por el jefe de la ópera, el director František Neumann, cosechó un éxito extraordinario. Un año más tarde sonó Katia Kabanová también en el escenario del Teatro Nacional de Praga bajo la dirección de Otakar Ostrčil, y siguieron varias escenificaciones locales (Bratislava 1923, Ostrava 1924, Pilsen 1926). Inmediatamente después, la ópera empezó a imponerse también en el extranjero (Kolín nad Rýnem 1922, Berlín 1926). Janáček compuso adicionalmente interludios orquestales entre los cuadros independientes para que hubiese espacio para la adaptación de la escena y no se originasen pausas molestas. En 1928 tuvo lugar en Brno una nueva escenificación de Katia Kabanová en ocasión de la inauguración de la Exposición Checoslovaca de Cultura Contemporánea. La verdad es que no se sabe si Janáček estuvo contento con la solemne representación, pero de todos modos le malhumoró el desinterés del público. En su calendario de pared se anotó lo siguiente: «Katia Kab. "solemne representación para la inauguración de la exposición". Ni comité ni ministros; medio vacío.». También enfadó a Janáček el concierto solemne y la representación de Jenůfa del día siguiente: «"Concierto solemne" Sinfonietta. ¡56 oyentes en el teatro! Nadie del comité de la exposición, nadie del gremio. Por la tarde, "solemne" Jenůfa -nadie en los palcos; ni comité de la exposición ni gremio.». Fue la última vez en que Janáček escuchó sus obras en Brno. Poco después se fue a Luhačovice y después a Hukvaldy, donde murió de repente.


Argumento

Acto I

En el parque municipal, el joven maestro Kudriash admira las vistas hacia el vasto paisaje y el río Volga. La tranquilidad de la tarde es alterada por la entrada iracunda del comerciante Dikoi con su sobrino Boris. Kudriash se extraña de cómo Boris aguanta continuamente la rudeza del tío. Pero este no tiene otra elección si quiere conseguir la herencia de la abuela para él y su hermana. Su ¡nfortunio todavía lo acrecenta el amor desesperado hacia una mujer casada, Katerina Kabanová. Katia tampoco es feliz en su matrimonio. Creció en una familia afectuosa, y ahora vive con un marido flojo y con la despótica suegra Kabanija. Ésta lo arregla para que su hijo Tijon se vaya al mercado de Kazan, y le reprocha la falta de amor filial y de obediencia. 


Cambio de escena

Katia y Varvara, muchacha de acogida en casa de los Kabanov, están bordando juntas, y Katia recuerda los días felices de su juventud. Katia reconoce que se enamoró secretamente de Boris, y la despreocupada Varvara se ofrece como intermediaria. Tijon, antes de su partida hacia el mercado, viene a despedirse de su mujer. Katia le suplica que se la lleve con él o que al menos le haga un juramento. Tijon no lo entiende y rechaza hacerlo. Kabanija vela por su despedida y, a sus órdenes, Tijon humilla a Katia con una indigna amonestación. 

Acto II

Kabanija reprocha a Katia el que no muestre bastante su tristeza ante la partida de Tijon. Varvara trae una llave de la puerta del jardín que le cogió a Kabanija para sus encuentros con Kudriash. Katia se resiste, pero al final toma la llave. El borracho Dikoi se acerca a Kabanija y le implora sus favores. 


Cambio de escena

En el barranco detrás del jardín de los Kabanov se encuentran Varvara y Kudriash. Por invitación de Varvara, se presenta también Boris. Katia intenta vencer el deseo por Boris, pero al final cae en sus brazos.

Acto III

Cubre el pueblo una intensa tormenta. La gente busca refugio en un monasterio medio derruido y abrasado. Kudriash aprovecha la ocasión e intenta convencer a Dikoi de su idea de instalar pararrayos en la ciudad. No obstante, para Dikoi la tormenta es una señal de la ira divina, y rechaza la interpretación de Kudriash con insultos. Varvara busca a Boris. Le cuenta que, desde el momento en que Tijon regresó a casa, Katia actúa como privada de sentidos. Los Kabanov también buscan refugio entre las ruinas. Katia, asustada por la tormenta, confiesa ante todos su infidelidad con Boris. Kabanija triunfa. Tijon quiere perdonar a Katia, pero ésta huye. 


Cambio de escena

Tijon y otras personas buscan a Katia en vano. Varvara está decidida a abandonar la casa natal y queda con Kudriash en una huida a Moscú. Katia se acerca a la orilla del Volga. Ella intuye que la única liberación ante una vida insoportable en casa de los Kabanov es la muerte. Solo anhela despedirse de Boris. Este llega con la noticia de que su tío le envía a dirigir un negocio en Siberia. Después de su partida, Katia se arroja a las profundas aguas del Volga.